CHOCOLATE

Chocolate, mucho.

En la taza de cartón,

En la galleta y el alfajor

En los blancos dientes,

En la boca sonriente.

En tus ojos verdes hermosos

Y en todo,

Todo tu corazón

DES ORDEN

Desorden

En caótico viaje
Ajetreo de alas

Las vueltas en espiral

Al orden inexistente

Te pierdo de repente

Te encuentro

Entro en tu vida

Ida y vuelta

Ta, te ti suerte para mi

Mientras tanto río y bailo

Lo mejor el porvenir

Nirvana y desorden

En caótico viaje.

VOS FUMÁ

Sabés cómo apagaría ese pucho entre tus dedos pulgar y mayor, para liberarlos, y que así pudieran moverse libres y comenzar un recorrido de caricias en las curvas y contra curvas suaves, blandas y húmedas de mi cuerpo, regalándome encantadoras sensaciones.

Sabés cuánto lo envidio siempre ahí aferrado a vos, en contacto con tu piel, dándote calor, acompañándote, casi como una prolongación de tu persona.

Imaginá, picante, dulce, perfumada.

Como ese puro armado con dedicación, el tabaco cosechado por manos curtidas bajo un sol abrasador.

Secadas sus hojas con paciencia y trituradas con maestría para que no se pierda la esencia, para que mantenga el aroma, para que su sabor sea el que ha sido por generaciones, lo cual le imprime su identidad.

Así soy para vos.

Si no lo imaginás, sabélo.

Quiero que me enciendas y me aspires, me enciendas más y que me exhales, me vuelvas a fumar y el ambiente se llene de mi presencia convertida en humo aromático, para que cada vez que fumes, me evoques en cada bocanada,

me permitas permanecer en tu boca por un instante y me saborees,

antes de morir en cada expiración.